Virgen de Lord (cultural)
La actual imagen de la Virgen es una talla policromada de 1’10m. de altura. ¿Cuál es, brevemente, la historia de la imagen? Las primeras noticias que tenemos de la capilla de Santa María en el macizo de Lord corresponde al año 989 con la compra que realizó el levita Cixila al conde de Urgel, pero no se nos informa sobre la imagen que había en esta capilla.
Cabe pensar que la construcción se hizo para alojar la imagen que se había encontrado, por lo tanto no era una pintura, sino una escultura que, con toda seguridad, no era la imagen actual. Un dato histórico objetivo es que en España no hay ni imágenes ni pinturas de la Virgen antes del siglo X, lo que no quiere decir que no existieran, simplemente que no nos han llegado. Por lo tanto, la imagen que había en la capilla de Santa María de Lord se perdió.
Hasta el siglo XVII no tenemos noticia documentada y fiable de la forma y características de la imagen de Lord. Es el Padre Camós quien nos ofrece esta valiosa información que corresponde al detalle con la imagen actual. Escribe: «ha sido hecha de poco tiempo a esta parte». Su visita al Santuario se produjo hacia el año 1650.
El estudio de los expertos en iconografía indica, por su disposición general y en especial para la posición del niño Jesús de pie sobre la rodilla de la Madre, por los pliegues de su vestido y por la serena expresión del rostro, que no tiene influencias estilísticas de los principales centros de producción de iconos, pero, por otra parte es una talla demasiado bien lograda para ser obra de un artista local…
Todo esto nos hace pensar que estamos ante una talla gótica, realizada hacia la segunda mitad del siglo XVI por un artista que no pertenecía a ninguna de las principales escuelas de aquel tiempo. Cabe preguntarse, sin embargo, ¿la imagen actual es la que vio el Padre Camós? ¿Es una réplica de aquella? ¿Qué ocurrió con la imagen durante las guerras del siglo XIX? Cuando en 1836 las tropas de la Reina Mª Cristina incendiaron el Santuario, ¿qué se hizo con la imagen? Las crónicas nos dicen que a continuación se habilitó en el mismo Santuario una capilla, y por lo tanto debería existir la imagen, pero de nuevo en 1840 queda suspendido el culto por destrucción de la capilla y la desaparición de la imagen que la propiciaba, ¿qué sucedió entonces?
Lo desconocemos, pero sabemos que siete años después de la destrucción la Virgen de Lord era venerada en una capilla lateral de la parroquia de Sant Llorenç de Morunys, ¿dónde estaba y qué sucedió en estos siete años? Aquí todas las explicaciones son hipotéticas, pero ¿se hizo una nueva porque se había quemado la anterior? ¿Se pudo salvar la antigua y se repararon los desperfectos? Sí podemos seguir el rastro de la imagen que se veneraba en Sant Llorenç desde 1847 hasta nuestros días.
Cuando en 1870 queda inaugurado el nuevo Santuario la imagen es subida en solemne procesión de la parroquia hasta la iglesia del Santuario. De allí ya no se moverá hasta la guerra civil española. Era el año 1937 cuando fue trasladada al Museo de Solsona, y en enero de 1939 comenzó su éxodo hacia Francia que era el destino deseado de los que la sustrajeron, pero por circunstancias de la guerra permaneció en la frontera, de donde una vez recuperada, en octubre de 1939, se la trasladó a Barcelona, después de pasar por los talleres de su antiguo restaurador, el Sr. Renart, y permanecer unos días en la casa de los Monegal, los reconstructores del Santuario, el 18 de agosto de 1940 vuelve a ocupar su trono en el Santuario de su nombre, donde sigue hasta el día que estamos escribiendo estas letras.
No podemos pasar por alto la opinión del Sr. Renart quien en 1923 subió hasta el Santuario y residió durante un mes para acometer una restauración de la imagen.
Él, que era un acreditado restaurador de Barcelona, tuvo la oportunidad de observar de cerca los trazos y la factura de la talla y no tuvo duda de que se trataba de una escultura de varios siglos de antigüedad.
Según esta opinión deberíamos pensar que la imagen se escapó del incendio y destrucción de 1836 y se trataría de la que vio el Padre Camós en el siglo XVIII aunque, quizás, con alguna reparación importante, pues la imagen actual tiene, alrededor del cuello, una pequeña rendija de pintura, lo que indica que la cabeza y el tronco no son de una pieza, sino una yuxtaposición de dos maderas.
No podemos concluir esta pequeña reseña histórica de la imagen sin incluir las últimas investigaciones y folletos publicados. Estos provienen principalmente del Sr. Ballbé, recopilador en dos valiosos volúmenes de las vírgenes negras y morenas de España, y entre ellas la Virgen de Lord.
El Sr. Ballbé, conocedor de la existencia de la talla de una Virgen en la casa de un sacerdote de Barcelona, le visitó y se encontró con una talla de proporciones y aspecto idénticos a los que describe el Padre Camós de la Virgen de Lord. Esta no tenía coronas, como la del Santuario, se le había retirado el policromado aunque conservaba algún resto del color negro en que había sido pintada la piel de la imagen.
Registrando la procedencia indagó que la imagen había sido escondida durante mucho tiempo en la casa de un particular y que éste, antes de su fallecimiento, tuvo remordimientos de conciencia y ordenó a sus hijos que entregaran la imagen a un sacerdote de Barcelona.
¿Es esta la auténtica Virgen de Lord tan escurridiza durante el siglo XIX? El Sr. Ballbé cree que sí. Y la imagen que actualmente se encuentra en el Santuario ¿es una copia sin que la tradición se haya hecho eco?
Sólo un minucioso análisis científico de la talla puede resolver las cuestiones planteadas.
Mientras tanto, que la Santísima Virgen, siempre viva y original en el corazón de todos sus fieles, nos lleve a todos a contemplar un día su imagen celestial.